MUCHOS CAMINOS PARA LLEGAR
A UNA MISMA META
Cada país tiene total libertad para estructurar la formación del
conductor, sin embargo todos cumplen con los estándares que marca la UE
mediante la Directiva
2006/126/ CU, en la cual se definen las pruebas que deben
superar los candidatos para obtener el permiso.
La citada Directiva describe los conocimientos teóricos, aptitudes
y comportamientos al volante mínimos que deben demostrar los aspirantes. Sin
embargo, nada se dice sobre el camino a recorrer para alcanzar la meta.
Dada la libertad de cada país, las diferencias entre los
sistemas de preparación dentro de la UE son notables.
En este informe se
exponen los datos más relevantes que se desprenden de este estudio europeo. En
dicho estudio, basándose en evidencias y rigurosos análisis, el grupo de
trabajo formuló un total de 27 importantes recomendaciones para la seguridad
vial y, en concreto, para el sistema de formación de conductores, que tienen
como objetivo final, entre otros, ayudar a conseguir una mejor preparación de
las personas que aspiran a la obtención del permiso de conducir.
Entre las 27 recomendaciones se destacan la inclusión de programas
sobre conciencia y aceptación de riesgos en la formación teórica o la
sistematización de prácticas de conducción en diferentes tipos de vías,
condiciones climáticas y niveles de luz. Algunas de estas recomendaciones ya
se están siguiendo en muchos países de nuestro entorno.
De
las 27 recomendaciones publicadas:
•
Seis recomendaciones se refieren de forma directa a los contenidos y métodos de
formación teórica de los conductores.
• Dos
tienen que ver con la formación práctica.
• Tres
están dirigidas a la cualificación de los profesores.
• El
resto de recomendaciones corresponden a líneas de investigación que se han de
desarrollar en relación con el tema, decisiones legales que pueden tomar los
estados miembros de forma voluntaria y acciones que suponen una revisión de las
pruebas médicas para la renovación de las licencias.
Tanto
los estudios como las experiencias relacionadas con el entrenamiento de la percepción de situaciones de riesgo y
la evitación de esas situaciones se encuentran en un estado muy incipiente pero
prometedor. Y dado que las actitudes inseguras o la motivación para conducir
con seguridad son de difícil evaluación durante el examen de conducción, la Comisión Europea ha redactado la
recomendación número nueve: Los Estados Miembros deben exigir que los
programas de capacitación para conductores incluyan lecciones sobre conciencia
de riesgos, aceptación de riesgos, autoconciencia, los peligros de la bebida conducción,
distracción y demás”.
Para esta área
de seguridad vial existen dos escenarios de actuación que vendrá a
ocupar el vacio existente en la formación actual del conductor:
- Formación en la percepción de riesgos. Hoy por hoy tan solo es obligatoria
en Alemania y opcional en Holanda y Reino Unido.
- Formación sobre en conocimiento
del riesgo y el autocontrol y control del mismo. Esta
formación es obligatoria y con número fijo de horas en Alemania, Estonia,
Finlandia, Luxemburgo y Suiza. Es opcional en Bélgica, Países Bajos y Reino Unido.
En
cualquiera de estos casos esta formación se realiza durante un periodo que
denominan de licencia provisional.
Se
aboga que en el ámbito de la
CE se debe promover la inclusión de una prueba de percepción de peligro en el
sistema de licencias de todos los Estados miembros.