viernes, 28 de agosto de 2015

PROBLEMAS PARA LAS AUTOESCUELAS FRANCESAS…

“Cuando las barbas de  tu vecino veas cortar, pon  las tuyas a remojar

En Francia y en España, autoescuelas, profesores y examinadores vienen teniendo problemas desde hace tiempo. Estos colectivos, tanto allá como acá, se han manifestado  en varias ocasiones para denunciarlos. Y las soluciones no llegan.

Un refrán dice: "éramos pocos, y parió la abuela”. Por si no era suficiente con la crisis económica, la excesiva proliferación de autoescuelas, o mejor dicho de centros,   la falta de examinadores y algún que otro problema más, de más difícil solución, como es la demografía, han llevado al sector a una competencia feroz, hasta el punto tal punto que, para sobrevivir,  los precios están, salvo excepciones, en niveles de hace 10 años; por si no fuera suficiente, repito, no pasará mucho tiempo sin que  llegue otro varapalo para las autoescuelas. Murphy ya lo decía: cualquier situación, por mala que sea, es susceptible de empeorar.

Acabo de enterarme de que en  Francia se ha creado una especie de Uber en versión autoescuela con el nombre de Ornikar. Los mismos quebraderos de cabeza que viene dando UBER a los taxistas, dará esta empresa a las autoescuelas. Ojalá el tiempo me desmienta para bien de las autoescuelas.

Parece ser que su intención es ofrecer una plataforma de intermediación por internet entre profesor y aspirante al permiso de conducir.

¿No se dice por ahí que cuando hay un intermediario, el producto se encarece? En este caso, ¿se abaratará? De ser así, cabe preguntarse a costa de qué o de quien.

Creo que la empresa creada ya tiene candidatos al permiso de conducir y profesores independientes dispuesto a trabajar con esta modalidad; el alumno no tendrá necesidad alguna de pasar por un centro tradicional, es decir por una autoescuela; se citará con el profesor y hasta podrá pagar en el lugar de la cita. Parece ser que el alumno ha de tener superado el examen teórico. El examen, en esta modalidad, ha de ser por libre, aunque los plazos son algo más largos.

La fórmula será lanzada en primer lugar y de manera oficial en septiembre del presente año en Nantes  y a continuación la harán extensiva a toda Francia.

Por ahora, no han pensado en un sistema de examen donde se puedan poner en contacto aspirante y examinador  “independiente”; de momento serán examinados, como siempre,  por funcionarios de la Prefectura de Tráfico;  pero todo llegará  y, por el camino que llevamos, si no se pone remedio, pronto veremos citarse por WhatsApp el examinando y el examinador “independiente”.

El presidente de la Unión Nacional de Escuelas de Conducción de Francia ha puesto el grito en el cielo y dice que es competencia desleal.




Desde Ornikar, que así se llama la empresa, dicen que lo que ellos quieren es modernizar un sistema que no está bien hecho.

Yo ingenuamente me pregunto: ¿A qué sistema se refieren? , ¿al de enseñanza-aprendizaje?, ¿dónde está, entonces, la innovación en la formación del alumno?, ¿esos profesores "independientes" tienen un sistema de enseñanza diferente al de los compañeros que trabajan en una Autoescuela?

Informan también de otra característica del sistema: se puede pagar al profesor en el lugar de la cita; y, entonces, me surgen más interrogantes: ¿quién factura? ¿para quién trabajan estos profesores?

Seguro que los colegas de autoescuela aún añadirían mil y una preguntas más.

Mucho me temo que aquí se va a dar muy pronto el efecto mariposa; ya se sabe, aquello del aleteo que luego repercute en la otra parte del mundo. Aquí es más probable que sus efectos lleguen pronto; el aleteo de la mariposa lo tienen las autoescuelas muy cerca, está aquí al lado, en Francia.




miércoles, 26 de agosto de 2015

AUTOESCUELAS DE CALIDAD EN CATALUÑA

Luz verde al Decreto por el que se establece un sello de calidad para las autoescuelas catalanas.

El gobierno catalán acaba da dar luz verde al Decreto por el que se establece el procedimiento de acreditación de las escuelas particulares de conductores como centros de formación de calidad.


Para obtener esta acreditación, que será  voluntaria, las autoescuelas deberán cumplir unos requisitos relacionados con sus instalaciones, con la formación y la sensibilización a sus alumnos.




Entre estos requisitos ha de haber una evaluación continua de los alumnos a través de un curso específico y un seguimiento posterior a la obtención del permiso; se ha de incluir en el programa formativo la presentación de un testimonio real de víctimas de accidentes de tráfico; los  turismos destinados a la formación no han de superar los seis años de antigüedad o bien que en la renovación de la flota se apueste por los vehículos de bajo consumo de CO2 o vehículos híbridos o eléctricos; será también un requisito el reciclaje formativo del personal docente de la autoescuela.

Las autoescuelas  que sean acreditadas como centros de formación de calidad se identificarán a través de un distintivo en el que consta el concepto "Autoescuela de Calidad". Estos centros también obtendrán una reducción en las tasas administrativas de tramitación con la SCT y además sus alumnos tendrán acceso a las actividades teóricas y prácticas desarrolladas por el Servei Català de Trànsit (Servicio Catalán de Tráfico).

El plazo de vigencia de la acreditación será de cinco años renovable por periodos de  de la misma duración siempre que la autoescuela siga cumpliendo los requisitos establecidos.  

Esperamos, y a la vez lo deseamos, que la iniciativa, pionera en España, tenga éxito no sólo para la reducción de los accidentes de tráfico, sino para el futuro de las autoescuelas que tantos varapalos se viene llevando a lo largo de su historia.

Nota: El blog  tiene dos publicaciones anteriores sobre este tema: (20/10/2014) y (1/12/2014)

lunes, 17 de agosto de 2015

LA CRISIS, LA TECNOLOGÍA, LOS JÓVENES Y LA CONDUCCIÓN

La crisis y la tecnología alejan a los jóvenes de la conducción

Publicado por:www.cincodias.com (lunes 17 de agosto de 2015

Si tiene chicos y chicas de menos de 25 años en su entorno y los compara con cómo era usted en aquella época, se habrá dado cuenta de que lo que para usted era una aspiración y una necesidad, tiene escaso interés para ellos. Usted se moría por sacarse el carné de conducir. Ellos prefieren gastarse ese dinero en un smartphone. Usted asocia la primera sensación de libertad e independencia con ponerse al volante y conducir a los amigos a cualquier parte. Ahora los jóvenes entienden que, para ser libre, hay que estar conectado. El coche no es parte de sus prioridades.

Las sensaciones asociadas con los automóviles están cambiando hasta quitarles toda la pátina de glamour que tuvieron. Hace 20 años, el prestigio social y el lujo eran el primer concepto que se asociaba con los vehículos, según el Observatorio Cetelem Auto 2014, seguido de la libertad. A día de hoy, la libertad y la independencia ocupan la primera posición, pero, dentro de 20 años, el coche se percibirá como “un medio de transporte entre otros”, según las conclusiones de Cetelem. La contaminación pasa de ser el quinto concepto asociado con la automoción a día de hoy al tercero cuando se pregunta por el futuro.

Este hecho preocupa a la industria del motor y a todas sus derivadas. Según una encuesta a nivel mundial de KPMG a los directivos del sector de la automoción (KPMG’s Global Automotive Executive Survey 2014), el 54% de los ejecutivos de estas empresas están convencidos de que los menores de 25 años no tienen el coche como primera opción de movilidad. Y la propiedad de un segundo vehículo en una familia se descarta “sobre todo en aquellos lugares en los que existe un transporte alternativo a menos de 15 minutos del sujeto”, señala la encuesta. Vivir en una gran urbe acentúa esta falta de interés por la conducción. “La llamada generación Millennial [los nacidos entre 1980 y 2000] aparentan menos interés en adquirir las propiedades tradicionales como la casa y el coche y prefieren alternativas como tecnologías móviles o ropa. El reto para la industria automovilística es encontrar la manera de atraer el interés de este grupo social”, detalla KPMG.

Y mientras las marcas del motor se esfuerzan en seducir a este grupo poblacional con la introducción de internet y las nuevas tecnologías en los coches, con diseños más rompedores y consumos mucho menores (y menos emisiones de CO2), la fuente del problema está un poco más allá. Porque es imposible atraer a un futuro conductor que no tiene interés en sacarse, ni siquiera, el carné de conducir.

Entre 2008 y 2014, el número de permisos de conducir expedidos en España ha bajado un 52%. En 2008 se otorgaron 1,36 millones de carnés de conducir, frente a los 659.240 permisos aprobados en 2014. Por tipos, el carné más común, el de tipo B, que autoriza para la conducción de turismos, ha reducido sus aprobaciones en un 48%. El impacto es mucho mayor en los permisos profesionales, en los carnés de tipo C y D, cuya expedición se ha reducido en un 72% para el tipo C (camiones) y en un 70% para los de tipo D (autobuses), según los datos facilitados por Pons Seguridad Vial, consultora especializada en movilidad. La consultora es fruto de la experiencia de Pons Editorial, que lleva más de 60 años publicando metodologías para la enseñanza de la conducción y la capacitación profesional del transporte por carretera.

“El sector de las autoescuelas atraviesa su propia crisis, que se ha visto agudizada por la económica”, explica Shara Martín, directora general de Pons Seguridad Vial. “Por un lado, por la menor natalidad, hay menos jóvenes que necesiten examinarse del carné. Pero además, ante un escenario de recorte de gastos, si tienen que elegir, van a preferir comprarse un smartphone o una tablet antes que dedicar esos 700 euros a aprobar el permiso de conducir”, dice la experta.
“El cambio en la mentalidad y en las prioridades también va acompañado de un cambio en la movilidad”, asegura Martín. Las posibilidades que aporta internet para poner en contacto a distintos usuarios ha hecho que surjan iniciativas de compartir coche, como BlaBlaCar o Uber, y sistemas de alquiler de coches más sencillos y baratos, como Respiro o Bluemove, que se apoyan en que el coche sea un bien compartido y promueven el uso del transporte público o la bicicleta.

El negocio cae pero las escuelas se multiplican
Siguiendo las normas de la lógica, si la expedición de permisos de conducir ha caído un 52% en seis años, lo normal sería concluir que el negocio de las autoescuelas habrá caído en un porcentaje similar. Sin negocio, los centros tendrían que cerrar y el censo de autoescuelas debería haber disminuido dramáticamente estos años.

Sin embargo, el efecto producido por los años de crisis ha sido justo el contrario. Mientras los permisos se desploman, el número de autoescuelas ha subido un 16%, según los datos de Pons Seguridad Vial. El año pasado había 5.971 centros con 9.197 filiales, frente a las 5.147 autoescuelas con 8.883 filiales de 2008.

“La crisis sí ha provocado el cierre de las grandes autoescuelas o el despido masivo de muchos profesores. Esto ha derivado en el ascenso del autoempleo, porque muchos de los despedidos se han montado otro centro por su cuenta, y en que otras autoescuelas se han quedado con los negocios que se iban cerrando, lo que ha provocado el mayor número de filiales”, detalla Shara Martín.

Este fenómeno es más acusado en provincias en las que la caída de los permisos es más fuerte. Por ejemplo, en Huelva, la expedición de carnés ha bajado un 70% y el número de autoescuelas ha subido un 69%. En Sevilla, se otorgan un 64% menos de permisos pero hay un 48% más de centros en funcionamiento.

La directora general de Pons Seguridad Vial apunta a que “la facturación del sector habrá caído cerca del 50%”, lo que implica que los nuevos “están sufriendo más”.

cincodias.com



domingo, 2 de agosto de 2015

LA HISTORIA SE REPITE…

Las autoescuelas necesitan más examinadores.

Oímos decir con frecuencia que  la historia se repite; y suele ocurrir porque el hombre no es capaz de aprovechar las lecciones que le brindan los hechos acontecidos.

Aquellos que pintamos canas vemos, con frecuencia, indudables coincidencias en  eventos que ocurren hoy con otros que ocurrieron hace 30 años y que nos recuerdan acontecimientos ya vividos. Me estoy refiriendo a los problemas de las autoescuelas con la Dirección General de Tráfico; no, no son nuevos, vienen de antaño.

En las crisis matrimoniales es frecuente que el hombre le diga a la mujer (o la mujer al hombre) : —perdona, cariño, esto de hoy no volverá a suceder —,  pero pasan los días, los meses y puede que los años… y vuelve a ocurrir, si no por la misma causa, por otra parecida. Ya  lo dejó dicho el filósofo alemán Hegel: los hechos siempre se repiten.
Treinta años separan la imagen en blanco y negro de la de color. Es evidente que no son las mismas personas, ni los mismos vehículos, ni las mismas calles, pero los hechos y las causas son los  mismos o parecidos y lo son también las entidades enfrentadas: autoescuelas y DGT o DGT y autoescuelas.

En los meses finales de 1987, los exámenes se aplazaban con excesiva frecuencia en Bareclona. En consecuencia, las autoescuelas no podían planificar su trabajo y los alumnos perdían jornadas de trabajo en unos casos y de estudio en otros; también perdían las autoescuelas; quien no perdía era la DGT.

El problema de la escasez de examinadores ha persistido en el tiempo (ver en este blog publicación del 18/09/2015). Debido a la situación, que se mantenía hasta niveles preocupantes, la Federación de Autoescuelas de Barcelona insertaba notas explicativas y publicidad institucional en la prensa escrita de finales de 1987.


Las autoescuelas, al final de la década de los ochenta,   tenían casi los mismos problemas  que al principio de la misma: escasez de alumnos, escasez de profesores, escasez de examinadores, proliferación de centros con más oferta que demanda, crisis y algunos más. Año tras año, las escuelas pedían soluciones  y año tras año sus peticiones eran ignoradas por la DGT.

Estamos a mitad de la segunda década del siglo XXI y leemos titulares como estos:

-      Las autoescuelas valencianas se manifestarán para pedir más fechas de examen  (las provincias.es)(2015).

-      Las autoescuelas se manifiestan para exigir más examinadores durante el verano (ABC-Valencia)(2015).

-      Casi 200 vehículos de autoescuelas exigen más examinadores durante el verano (autocasión.com)(2015).

-      Las autoescuelas, desesperadas con Tráfico: “Faltan 500 examinadores y nos ofrecen 16” (vozpopuli.com) (2015).

-      Faltan examinadores para las autoescuelas (cadena SER)(2015).

Amigos lectores y lectoras, dos preguntas retóricas:

 ¿No creen que la historia se repite? 

¿Tan poco capaces son los responsables de este problema para no haber encontrado, después de tantos años, una solución satisfactoria para todos los interesados?