Los
profesores de autoescuela denuncian su precariedad: la mayoría cobra por clase,
afirman.
La
Asociación Almeriense de Profesores de Formación Vial (Aproforvial) ha
denunciado la precariedad laboral que soportan sus asociados -que son todos
asalariados, no propietarios de empresas-. Una precariedad que tiene múltiples
caras, como el pago del sueldo, “en la mayoría de los casos, por clases
impartidas, sin respetar el convenio”; una cotización a la baja en la
Seguridad Social, es decir, “un fraude, porque se cotiza por menos horas de las
realmente trabajadas”, y jornadas interminables, de hasta 12 horas diarias,
entre otras condiciones que se apartan en muchos casos de la legalidad, como
expone a este diario Elisa Parra, presidenta de la asociación.
(…)Esto llevó a que muchos de los profesores quedaran en el paro
y tuvieran que dirigir su carrera por otros cauces, como la conducción de
autobuses o camiones. La asociación almeriense de profesores, que antes de la
crisis se acercaba al centenar de afiliados, cuenta hoy con menos de una
treintena de miembros. Según sus datos, en Almería existen más de 80
autoescuelas, que tienen a alrededor de 200 profesores asalariados. “Los
profesores vivimos hoy muchísimo peor que hace 40 años, cuando yo empecé.
Ahora no estamos valorados como enseñantes. Se han tirado los precios,
pero también se ha tirado nuestra valía”, concluye la presidenta de
Aproforvial.
Comentario del responsable de este blog:
No le falta razón a la Presidenta, pero
esto hace años que se veía venir sin que nadie le haya puesto remedio. La
precariedad laboral y económica de los profesores es consecuencia de la precariedad
económica de las propias autoescuelas.
Los directores generales de la DGT se han sucedido unos a
otros y han hecho muy poco, por no decir nada, por mejorar la “valía” de la que
habla la presidenta. Y qué decir de otros organismos, como los sindicatos y
CNAE. Los miembros del Comité Ejecutivo del Organismo que se supone que están
para la defensa de las autoescuelas a nivel nacional llevan en sus puestos más
de treinta años. Y no por un decreto ley, sino porque los han votado las
autoescuelas.
La situación hace tres décadas era mejor
que la de ahora. Algo habrán hecho mal estos ejecutivos para que las autoescuelas
y los profesores hayan desembocado en la
situación actual, sin embargo ahí siguen…¿por qué? Recuerden
aquello de Winston Churchill: "Cada pueblo tiene el gobierno que se merece"