jueves, 12 de noviembre de 2020


 

LOS VEHÍCULOS AUTÓNOMOS TAMBIÉN DEBERÍAN IR A LA AUTOESCUELA

 

La irrupción de de coches y vehículos de reparto autónomos en nuestras carreteras y zonas urbanas representa una realidad cada vez más cercana. Más allá de la discusión habitual sobre la toma de decisiones desde un punto de vista ético, debemos preguntarnos si estás máquinas son fiables y confiables de cara a su convivencia con las personas.

En nuestro día a día interaccionamos con vehículos en zonas urbanas o interurbanas a todas horas. No nos preguntarnos quién está detrás del volante, si el coche respetará el semáforo que estamos a punto de cruzar, si el autobús se subirá a la acera provocando un accidente, o si la motocicleta atropellará a aquel peatón que no cruza por el lugar indicado. Suponemos que todos estos vehículos son conducidos por alguien con capacidad para hacerlo, pues es una persona que ha sido entrenada y evaluada en un examen.

Sin embargo, cuando el concepto de autonomía en la conducción se aplica a una máquina, nos asaltan dudas de todo tipo. ¿Tiene una máquina derecho y responsabilidad con esa autonomía? ¿Nos atropellará por algún motivo accesorio a nuestro comportamiento? ¿Interpretará adecuadamente nuestro comportamiento como conductores?

 

“Lea el artículo completo en :

https://theconversation.com/los-vehiculos-autonomos-tambien-deberian-ir-a-la-autoescuela-133705

miércoles, 28 de octubre de 2020

LA MUJER AL VOLANTE

 

Así pensaba yo sobre la mujer al volante hace nada más y nada menos que 35 años.

El 16 de octubre, publiqué,  en este blog, un artículo con el siguiente título: ¿ES LA MUJER MÁS INTELIGENTE EMOCIONALMENTE QUE EL HOMBRE DURANTE LA CONDUCCIÓN?

Hacía alusión en el mismo a un test validado muy recientemente, por el grupo de investigación Qualiker de la UPV/EHU, en colaboración con la Dirección de Tráfico del Gobierno Vasco. Han desarrollado una escala para medir la inteligencia emocional de los jóvenes durante la conducción. Una vez desarrollado el test, éste ha sido validado con cerca de 600 jóvenes.



 

Desde la perspectiva de género, sus autores han manifestado: “demostramos que en esta franja de edad las mujeres tienen una mayor inteligencia emocional que los hombres. Y eso tiene una aportación interesante porque sólo en los hombres se ha encontrado que la primera causa de muerte sea la de los accidentes, pero no en las mujeres. Las mujeres muestran una conducta media mucho más alta y una puntuación más alta de inteligencias emocional en EMOVIAL”.

También hacía alusión a otros estudios anteriores que iban en la misma dirección.

Al día siguiente de haber publicado estas consideraciones me acordé que el prestigioso periódico de Barcelona, La Vanguardia, del día 16/11/1985, en su sección de cartas al director, publicó una mía con el título de la “Mujer al volante”.

Las reflexiones que un servidor hacía en aquella carta, hace 35 años, apuntaban a las conclusiones que se extraen de estos últimos estudios.


 






viernes, 16 de octubre de 2020

¿ES LA MUJER MÁS INTELIGENTE EMOCIONALMENTE QUE EL HOMBRE DURANTE LA CONDUCCIÓN?

 

En términos generales y según estudios realizados últimamente, las conductoras españolas  son más inteligentes emocionalmente que los hombres. Forman parte, cuando están al volante, del grupo de riesgo bajo. Se ven menos implicadas en accidentes de tráfico y reciben menos multas que los conductores.

 

Es sabido que la probabilidad de tener un accidente vial se incrementa por las llamadas conductas de riesgo. Una de estas conductas,  que se olvida con frecuencia, es la falta de control de nuestras propias emociones. Las emociones juegan un papel importante en el comportamiento de los conductores/as.

La inteligencia emocional y la seguridad vial son dos elementos que acompañan unidos a los conductores y conductoras. Dicen los estudios que a mayor inteligencia emocional, más seguridad vial.

En la mayoría de las ocasiones no somos conscientes de cómo influyen las emociones en nuestra forma de conducir. Ser consciente de que las emociones afectan a nuestro modo de conduccir es imprescindible para evitar accidentes de tráfico.

Se puede  afirmar que las emociones son importantes desde el punto de vista de la conducta, sobre todo en aquella que tiene que ver con procesos de toma de decisiones.

Conducir es una actividad psicomotora compleja, en la que se toman muchas decisiones por minuto, y para que sean seguras debemos ser conductores y conductoras emocionalmente inteligentes.

La gestión adecuada de nuestras conductas es lo que se llama inteligencia emocional, término que se ha popularizado en distintos campos durante estos últimos años.

Ha sido el psicólogo conductual estadounidense Daniel Goleman quien popularizó el término a partir de la publicación de su libro Emotional intelligence (Inteligencia emocional, 1995)

Goleman (1995) define la inteligencia emocional como: “la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los demás, de motivarnos y de manejar 


La inteligencia emocional consiste en una serie de habilidades que pueden ser adquiridas y aumentadas con la práctica constante, es decir, pueden ser trabajadas y mejoradas para evitarnos riesgos y consecuencias fatales. La formación de los pre-conductores/as en la autoescuela brinda una excelente ocasión para trabajar y desarrollar la inteligencia emocional. Identificar las propias emociones y regularlas de forma apropiada nos hace mejores conductores/as.

Se podría decir que la inteligencia emocional es esa parte de la inteligencia que no tiene parámetros de medición. Va más allá de las habilidades cognitivas y del coeficiente intelectual, y nos brinda más o menos seguridad, según sea nuestra capacidad de gestión. En otras palabras, la inteligencia emocional nos avisa si lo mejor es reaccionar visceralmente o detenernos y no actuar por impulso.

Aristóteles nos dejó dicho: Cualquiera puede enfadarse, eso es fácil, pero enfadarse con la persona adecuada, al nivel adecuado, en el momento adecuado, por el motivo adecuado y de la manera adecuada, no es tan fácil.

Nos dicen que la inteligencia o coeficiente intelectual parece que predice el 20% de los factores determinantes de éxito; el 80% restante parece que depende en gran medida de la Inteligencia Emocional.

Nuestras decisiones están inducidas y reforzadas por nuestras emociones y nuestras creencias.

Un día, por ejemplo, mientras estás conduciendo reprogramas tu GPS o decides utilizar el móvil para llamar a tu casa y mantienes una conversación durante unos minutos. Has visto que ni en un caso ni en otro ha pasado nada. Lo seguirás haciendo hasta  que llegue el día en que tengas un accidente. A partir de aquí, tus creencias ya no serán las mismas.






El estudio sobre emociones, decisiones y conducción realizado por Prevensis y galardonado con el Premio Seguridad Vial  por la patronal del seguro Unespa (2009-2010), avisa de que, a veces, no somos capaces de controlar nuestras emociones durante la conducción y que sólo siete de cada cien conductores mantienen un control emocional correcto y equilibrado al volante.

Las emociones son la parte más instintiva y primitiva de nosotros. Son respuestas automáticas de nuestro cerebro emocional que guían nuestro comportamiento sin que, en la mayoría de los casos, seamos  conscientes de ello.

 

En la vida cotidiana, una decisión excesivamente emocional puede tener graves consecuencias (el pique entre conductores por un adelantamiento u otra circunstancia cualquiera). Conduciendo nuestro automóvil constantemente estamos tomando decisiones que, en ocasiones,  pueden marcar nuestra vida y la de otros para siempre.

 

Según los resultados del estudio citado, un 71.9% de los conductores tienen un bajo control emocional y en el 16.8% es nulo. Sus oscilaciones entre los diferentes estados emocionales les hacen vulnerables ante situaciones que pueden desembocar en accidente.

 

Es archisabido  que el factor humano influye de forma importante en las muertes por accidentes de carretera, sobre todo entre los jóvenes. Las estadísticas nos dicen que nueve de cada diez son consecuencia de comportamientos inadecuados o distracciones. Sin embargo, hasta el momento no hay muchas investigaciones encaminadas a  conocer hasta qué punto las capacidades emocionales pueden afectar a los accidentes de tráfico.

Muy recientemente, el grupo de investigación Qualiker de la UPV/EHU, en colaboración con la Dirección de Tráfico del Gobierno Vasco han desarrollado una escala para medir la inteligencia emocional de los jóvenes durante la conducción. Una vez desarrollado el test, éste ha sido validado con cerca de 600 jóvenes,

 

El test servirá para medir la capacidad del conductor/a para    prestar atención a las emociones, comprenderlas y gestionarlas, con la intención de mejorar la seguridad vial.

 El cuestionario EMOVIAL, como le han llamado, mide la inteligencia emocional de las perwonas en tres dimensiones: la atención que se presta a las emociones durante la conducción, la comprensión de las emociones que se sienten durante la conducción y, muy especialmente, la regulación de las emociones durante la conducción para que no lleguen a ser nocivas y peligrosas.

Según sus autores, las  conclusiones extraídas de la investigación han puesto de manifiesto que las personas con alta inteligencia emocional se ven menos expuestas a la vida en general.  Además, “las personas que obtuvieron una puntuación alta  mostraban más empatía con los peatones y ciclistas”.





 
Desde la perspectiva de género, han manifestado: “demostramos que en esta franja de edad las mujeres tienen una mayor inteligencia emocional que los hombres. Y eso tiene una aportación interesante porque sólo en los hombres se ha encontrado que la primera causa de muerte sea la de los accidentes, pero no en las mujeres. Las mujeres muestran una conducta media mucho más alta y una puntuación más alta de inteligencia emocional en EMOVIAL”

Las autoescuelas, en lo sucesivo, pueden disponer de una herramienta para medir con rigor el impacto de las emociones en los accidentes y que puede ayudar a mejorar la formación  en seguridad vial que imparten en sus centros.


adecuadamente las relaciones”.

viernes, 18 de septiembre de 2020

«Por una movilidad sin emisiones»

 

En 2020, el tema de la SEMANA EUROPEA DE LA MOVILIDAD es «Por una movilidad sin emisiones».



 

El tema refleja el objetivo ambicioso de lograr un continente climáticamente neutro para el año 2050, tal como señaló Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, en la presentación del Pacto Verde Europeo. Además, subraya la importancia de la accesibilidad de un transporte sin emisiones y promueve un marco inclusivo en el que participen todos los actores.

 

Aunque las investigaciones indican que los desplazamientos en coche se han reducido en las grandes ciudades y se espera un 50% de desplazamientos en transporte público, en bicicleta o a pie en los próximos años, los últimos informes de la Agencia Europea del Medio Ambiente (AEMA) confirman un aumento considerable de las emisiones del transporte respecto a los niveles de 1990. En concreto, las emisiones del sector del transporte en su totalidad han aumentado un 28% entre 1990 y 2018, lo que subraya la necesidad urgente de fomentar soluciones climáticamente neutras para el transporte de las zonas urbanas. Es cierto que se han adoptado medidas estrictas en varias de las grandes zonas metropolitanas de Europa, sin embargo, la cuota de energía renovable utilizada para el transporte permaneció en el 8,1% en 2018.

 

Los efectos del cambio climático y demás fenómenos ambientales relacionados, como inundaciones, sequía u olas de calor, constituyen una de las amenazas más inmediatas para el bienestar de los europeos. Según el Acuerdo de París, cuyo objetivo es mantener el calentamiento global en un umbral de 1,5 grados, es fundamental lograr la neutralidad de carbono para el año 2050. Esta neutralidad se puede alcanzar con diversos métodos, entre ellos la reducción de emisiones de carbono gracias a la aplicación de soluciones que generen bajas emisiones y emisiones cero para el transporte particular y el público, además del uso de la bicicleta y los desplazamientos a pie. Según las últimas estimaciones, cerca del 80% de la población mundial vivirá en zonas urbanas en 2050, por lo que las ciudades constituyen el marco idóneo para poner en práctica estos planes ambiciosos.

A pesar de las distintas condiciones climáticas, geográficas y socioeconómicas de las zonas urbanas europeas, hay una serie de medidas que se pueden adoptar para promover un entorno urbano climáticamente neutro e inclusivo. Por tanto, la SEMANA EUROPEA DE LA MOVILIDAD 2020 anima a la población y a las autoridades locales a tomar medidas para cumplir el objetivo a largo plazo de un continente climáticamente neutro.

 

A pesar de que el objetivo de la estrategia a largo plazo apunta al futuro lejano, la aplicación de medidas directas para abordar la contaminación, las emisiones de carbono o la congestión del tráfico puede tener efectos inmediatos. La congestión en las zonas urbanas y sus alrededores cuesta en la actualidad casi 100 000 millones de euros al año, es decir, el uno por ciento del PIB de la UE.  Además, la contaminación atmosférica es causa directa de más de 400 000 muertes prematuras.

 

Por tanto, comenzar a aplicar medidas de largo plazo, como fomentar el uso de la bicicleta o los desplazamientos a pie, además de un transporte público de bajas emisiones producirá efectos inmediatos muy positivos.

 

Aunque son varios los municipios de Europa que han puesto en marcha iniciativas ambiciosas, no resulta fácil cuantificarlas porque los planes de movilidad suelen concentrarse en un futuro a largo plazo. Además, hay tecnologías de bajas emisiones o emisiones cero, como los autobuses propulsados por hidrógeno, que todavía no pueden ofrecer economías de escala. La Comisión Europea celebra los objetivos ambiciosos que han establecido algunas ciudades europeas como Ámsterdam, Barcelona,              Copenhague y Praga, entre otras, para lograr un entorno urbano de emisiones cero en el año 2050, si no antes.

 

(Fuente: Guia  de Directrices Temáticas de La Semana  Europea de la Movilidad. (16-23 de Septiembre de 2020)




jueves, 3 de septiembre de 2020

LAS AUTOESCUELAS ONLINE DESAFIAN A LA DGT Y OPERARÁN EN TODAS LAS PROVINCIAS


Es el título de un artículo publicado en voxpopuli.com. No se puede negar  la voluntad que le ponen estos señores de las autoescuelas online, más concretamente la autoescuela “Onroad”.

Retiro lo “de cansino” que decía en mi anterior artículo. Hasta aquí se venían metiendo, injustamente a mi entender, con las autoescuelas de toda la vida. En esta nueva fase, desafían a la todopoderosa DGT. El titulo que encabeza el artículo es bastante descriptivo.

La autoescuela digital Onroad ha anunciado que empezará a operar en toda España sin necesidad de abrir oficinas físicas tal y como ahora se exigen en el Reglamento de Autoescuelas.

Al parecer la Autoescuela Onroad basa su decisión en el análisis jurídico  realizado por el abogado del Estado en excedencia, miguel Temboury Redondo, según el mismo la exigencia del Reglamento de Autoescuelas de  contar con un local ha sido tácitamente derogada por normativa posterior de rango superior por lo que resulta ilegal obligar  a cumplir con la apertura física de un local para ejercer la actividad y presentar alumnos a examen en cualquier provincia.

Ahora, a esperar el desenlace del desafío. ¡Interesante!  


jueves, 27 de agosto de 2020

¿CUI PRODEST?

 

Nuevo revés para locales comerciales: las autoescuelas pueden ser sólo online.

Es el titular que leo en un periódico digital el día 8 de agosto. Enseguida me pregunté: ¿Cuit prodest? Latinismo que significa ¿a quién beneficia? Término jurídico y lema de policías y detectives en sus investigaciones.

Como continué leyendo, enseguida tuve la respuesta.

En las siguientes líneas decía que  un informe del que fuera subsecretario de Estado de Economía, Miguel Temboury, concluye que el Reglamento de Autoescuelas que obliga a tener local físico ha quedado anulado por normas posteriores. ¡Y mira por donde, las  autoescuelas sin saberlo y pagando alquileres por algo innecesario y sin utilidad alguna.

El señor Miguel Temboury, autor del susodicho informe es un afamado abogado que ha pasado por distintos cargos en la Administración Pública. Se estrenó en 2001 como asesor económico de la mano de Rodrigo Rato. De 2002 a 2004 ocupó el cargo de director del Gabinete del Ministro de Interior. Después pasó a la excedencia integrándose como socio en un importante bufete de abogados. En 2007 fue designado presidente de la Corte de Arbitraje de Madrid. Tras la victoria del PP en las elecciones generales de 2011, fue nombrado en noviembre de ese año subsecretario del Ministerio de Economía y Competitividad, hasta este 23 de septiembre de 2016, cuando cesó en el cargo. Se podría decir que el final de su paso por la Administración Pública no es el que desearía todo funcionario.

Como no me puedo creer que este letrado haya hecho este informe de forma altruista, vamos, como yo hago estos artículos, deduzco que alguien  se lo debió encargar, pero ¿quién?

Seguí leyendo y a las pocas líneas lo pude saber. El periodista del Confidencial que firma el artículo, queriendo o sin querer, lo deja meridianamente claro en las siguientes líneas:

 El que fuera mano derecha de Luis de Guindos ha redactado este documento, fechado el pasado 21 de julio y al que ha tenido acceso El Confidencial, a instancias de la autoescuela digital Onroad, que aterrizó en España en 2018 y que es filial del grupo francés  Ornikar  'start-up' nacida en 2014 y que en apenas seis años ha conseguido hacerse con un 30% de la cuota de mercado del país vecino. Un éxito que aspira replicar al sur de los Pirineos y, para conseguirlo, está dispuesta a lanzar una ofensiva en todos los frentes que permita consolidar el modelo digital, libre de imposiciones del pasado, como la que hace referencia a los locales.

La respuesta al Cui Prodest la hubiera deducido hasta Pepe Carvalho, el detective creado por Manuel Vázquez para sus novelas policiacas.

Esta campaña emprendida por las autoescuelas online en contra de las autoescuelas de toda la vida no la entiendo y ya me resulta cansino escribir sobre el tema.

Noticia en:

https://www.elconfidencial.com/empresas/2020-08-09/temboury-onroad-autoescuelas-online-locales-comerciales_2708771/#:~:text=Para%20andar%20sobre%20seguro%2C%20la,un%20'co-working'


miércoles, 22 de julio de 2020

LA AUTOESCUELA ONLINE Y UNA MALA NOTICIA PARA LA SEGURIDAD VIAL

DGT, en su día, propuso para el nuevo Reglamento de Conductores, entre otros cambios, la obligación de impartir ocho horas de clases presenciales sobre concienciación para poder sacarse el carnet de conducir. Los contenidos de esas ocho horas no entrarían en el examen. Debían ser horas dedicadas a sensibilizar y concienciar sobre los factores de riesgo en la conducción y las medidas preventivas. Charlas con víctimas de accidentes, análisis entre iguales de determinados comportamientos, etc. Pero, lamentablemente,  la  DGT recula y retira la propuesta y yo me pregunto: ¿Quién ha ganado? ¿Quién ha perdido?

Ante esto, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) dictó en su día un informe desfavorable a la idea de obligar a los aspirantes a conductores a pasar por una autoescuela de forma presencial.

 Desde mi punto de vista ha ganado el espíritu mercantilista de la formación y quienes lo defienden por encima de otras consideraciones. Ha perdido la seguridad vial. Es toda una evidencia.



Los accidentes de tráfico no se producen por desconocimiento de las normas y señales de tráfico, que dicho sea de paso, como contenidos de aprendizajes cognitivos o conceptuales son los que realmente se pueden enseñar online. Son otras las causas de los accidentes. El conductor o la conductora sabe lo que es un STOP y lo que ha de hacer, pero, por los motivos que fueren, no lo respeta. Lo mismo podríamos decir sobre el exceso de velocidad, la ingesta de alcohol, las distracciones, el móvil, etc., etc.

 

Es obvio que los contenidos procedimentales para el manejo del vehículo, no se pueden enseñar online, excepto en la fase cognitiva o declarativa del aprendizaje de la destreza, es decir en esa fase en la que los alumnos concentran sus esfuerzos en adquirir la información necesaria sobre la ejecución de la destreza, bien recibiendo instrucciones verbales, o mediante la observación de un modelo. El alumno ha de aprender en esta fase dónde están situados los diferentes mandos y su especifi­ca utilidad, así como la manera en que  han de ser manejados y cuándo han de utilizarse. Y en cuanto a los contenidos actitudinales (valores, normas, comportamientos, creencias, etc.) no creo que nadie se atreva a defender que el sistema online sea el más  adecuado y aconsejable para hacerlos llegar a los futuros conductores o conductoras.

La Plataforma de Autoescuelas Digitales puso el grito en el cielo diciendo  que eso les perjudicaba mucho porque ellos ofrecían una formación exclusivamente online y si les obligaban a dar ocho horas teóricas presenciales estaban en desventaja.

La CNMC no cuestiona la exigencia de formación adicional para incrementar la sensibilización de los nuevos conductores sobre los riesgos de la circulación, sin embargo, considera que no se debe reservar la formación en exclusiva a las autoescuelas ni vincularse temporalmente al examen teórico, pues ello favorece a las autoescuelas frente a otros modelos de negocio (como los prestadores de formación online) sin que exista justificación para ello. Negocio y mercantilismo versus seguridad vial y educación (que no aprendizaje).



base al dictamen de la CNMC, la DGT recula y decide retirar el polémico contenido del borrador del Real Decreto para la modificación del Reglamento de Conductores. A pesar de ello, el director de Tráfico, Pere Navarro, sigue defendiendo que todo contenido relacionado con el Reglamento  de Circulación y Seguridad Vial puede aprenderse de manera online, pero aquellos contenidos relacionados con «los valores, la concienciación y sensibilización no es fácil hacerlo por Internet, hay que hacerlo presencialmente».

«Los accidentes de tráfico son reales, no son virtuales«, ha  afirmado el máximo responsable de la DGT, que considera que la CNMC con su informe «no entendió el tema» al realizar una «banalización de la formación vial». Totalmente de  acuerdo, Sr. Director.

 

Sí o sí se debería acudir a una autoescuela o a  cualquier otro centro especializado para realizar in situ esas sesiones en materia de concienciación y sensibilización vial que tantas vidas po-drían salvar. El coste de una buena preparación nunca es un gasto sino una inversión. ¿Hay algo más valioso en lo que se pueda invertir que la propia vida y la de los demás?

Desde la Plataformas de Autoescuelas Digitales han celebrado la marcha atrás de la  DGT,  aunque «no estamos contentos con lo que ha expuesto el director de Tráfico. Llevamos defendiendo la educación online mucho tiempo y el informe de CNMC confirmó que teníamos razón. Ahora Pere Navarro nos ha comparado con autoescuelas low cost. Esto es como decir que la UNED es low cost. Nosotros somos exactamente igual que una formación convencional pero más barata», asegura Miguel González Gallarza, presidente de la Plataforma de Autoscuelas Online y Ceo de Onroad.

 

«Para sacarse el teórico de conducir no es necesario acudir presencialmente a ninguna clase. Para el práctico evidentemente sí. Para mi esto es más un chiringuito montado entre las grandes autoescuelas. Menos mal que ha venido la CNMC a decirles que no que la formación online es posible», explica González- Gallarza. 

 

«Internet y las redes son hoy las principales vías de concienciación de los jóvenes, y el confinamiento ha echado por tierra todos los argumentos de las autoescuelas tradicionales contra la formación online» ha asegurado también el portavoz de la PAD.

 

De hecho, siguen obligando a sus alumnos a pasar por la autoescuela para trámites, papeleos y consultas, a pesar de ser operaciones que podrían realizarse desde un teléfono móvil. ¿Tiene esto algo que ver con la educación de la que hablamos?



de estas sesudas declaraciones, y teniendo en cuenta que este modesto jubilado no haya sido nunca “CEO” de una empresa, sino un humilde director de autoescuela y un profesor de Formación Vial, espero que a mí me admitan pulpo como animal de compañía. Gracias.

 

Llegado a este punto quisiera, amables lectores y lectoras, hacer algunas acotaciones a las declaraciones de este CEO (Chief Executive Officer) partiendo de la base de aquel refrán: más sabe el diablo por viejo que por diablo.

 

Tengo la impresión de que el presidente de la Plataforma de Autoescuelas Online, aparte de entender que esas 8 horas presenciales pudieran perjudicar a su negocio, no ha entendido mucho más sobre el fin y el objetivo de las mismas.

 

No creo que,  en términos generales, las autoescuelas tradicionales estén en contra de la enseñanza online, yo nunca lo estuve. He hecho más de un curso por la UNED. Las autoescuelas, de hecho y en cierto modo,  han utilizado desde hace tiempo herramientas y recursos docentes para llevar a cabo el proceso enseñanza/aprendizaje a  distancia, aunque ahora no hablemos de eso, sino Educación y concienciación sobre factores de riesgo y medidas preventivas en la circulación vial. No es lo mismo educar que formar. La educación es mucho más que la formación.

 

Permítanme seguir haciendo algunas  observaciones más sobre el particular:

El conseller de Educación, Universidad e Investigación, Martí March, doctor en Ciencias de la Educación por la Universidad de Barcelona. Catedrático de Sociología de la Educación y Pedagogía Social de la Universidad de las Illes Balears, ha reconocido, en el pleno del Parlament, que «la presencialidad es un elemento clave para hacer una educación de calidad».

Y muy recientemente, en una entrevista  que le ha hecho un diario mallorquín, el periodista le ha planteado si están sobrevalorados las clases online. El conceller ha respondido siguiente: « No diría eso. Para el próximo curso  planteamos la posibilidad de que, en Bachilleraro y FP, cuatro días a la semana sean presenciales, y el quinto online. No hay que renunciar a las herramientas telemáticas. La digitalización es necesaria. (…) La digitalización no debe ir contra la presencialidad, sino complementarla».  

La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá ha defendido en la Conferencia Sectorial de Formación la actividad presencial en las aulas y ha venido a decir (cito de memoria):

La educación a distancia no sustituye el aprendizaje presencial, ni la interacción entre los alumnos y alumnas entre sí, ni la interacción de los alumnos y los docentes...

Por último quiero traer aquí unas reflexiones de
José Félix Pons de Villanueva, Director de Desarrollo IESE Business School en Alemania, Austria y Suiza sobre la formación online:

« (…) El guión de las lecciones tiene que ser ensayado con mucho más detalle. Aun así, los resultados no son malos. A veces son incluso paradójicamente mejores, pero eso depende mucho de la asignatura. Algunas materias son aptas, otras difícilmente. Hay profesores con experiencia en el aula virtual que la han abandonado diciendo que enseñar es mucho más que transmitir conocimientos. Enseñar es formar y eso requiere el trato humano, mirarse a los ojos, desarrollar aptitudes, algo difícil o casi imposible de alcanzar de una manera virtual. Es difícil transportar valores de manera virtual, casi tan difícil como educar a los propios hijos de un modo virtual».


viernes, 17 de julio de 2020

UN PROBLEMA MÁS QUE SERIO PARA MUCHAS AUTOESCUELAS


“El desinterés del Gobierno amenaza con el cierre de un 20% de las autoescuelas”
La situación de los exámenes de conducir dista mucha de estar solucionada. Faltan examinadores. Este es un problema endémico que la DGT arrastra del siglo. El servicio de exámenes de conducir de la DGT siempre fue mejorable.





Leer noticia completa en:
















lunes, 13 de julio de 2020

La DGT está jugando con las autoescuelas y sus alumnos.



Publicado en: www.elperiodico.com/es2020)

Probando maneras de presentar 'on line' los exámenes y cambiando las plantillas continuamente, y endiñándonos un sistema que no funciona. Van probando en directo, y si el alumno no va a examen pues que no vaya. Prometieron exámenes durante el mes de agosto, y hoy nos envían un e-mail cancelando algunos exámenes de agosto. Paciencia, tampoco pasa nada.  Se nos prometieron exámenes y capacidad de examen y nos han recortado los cupos ya dos veces, pero no pasa nada. 

Por el estado de alarma se prorrogan tasas, teóricas... 79 días, pero el sistema de la DGT no lo reconoce, y el alumno no se puede examinar. No pasa nada.

Nos citan a examen con menos de 24 horas de antelación. No pasa nada.

No llegan las autorizaciones para vías abiertas. No pasa nada.

Y así, un largo etcétera.

Para la DGT no pasa nada, pero para las autoescuelas sí pasa. No podemos ofrecer un buen servicio a nuestros alumnos; nuestros alumnos no son números ni estadísticas: son personas que pagan su tasa a la DGT.

La DGT sale en la radio y la televisión lavando su imagen y contando mil mentiras. Por una vez ¿no pueden salir y decir la verdad? ¡El sistema no funciona! ¿Por qué debemos de ser las autoescuelas las que tengamos que discutir con los alumnos por fallos, errores y demás de un Ministerio?

¿Cómo es posible que el Estado nos niege el derecho a trabajar? ¿Qué pasa con los derechos de los alumnos que pagan unas tasas para examinarse?


miércoles, 24 de junio de 2020

PREOCUPANTES DECLARACIONES DEL PRESIDENTE DE LA AS-SEMBLEA DE TREBALLADORS ASSALARIATS D'AUTOESCOLES DE CATALUNYA (ATAAC),


Este colectivo de formadores de autoescuelas de Catalunya teme los contagios de coronavirus entre alumnos, profesores y examinadores con la vuelta de la actividad porque ven, según su presidente, falta de medidas de seguridad en el sector. Por este motivo piden a los futuros alumnos que se informen bien al escoger la autoescuela.


En declaraciones a Europa Press, el presidente de la Assemblea de Treballadors Assalariats d'Autoescoles de Catalunya (ATAAC), Josep Maria Marín, explica que no quieren que la precariedad laboral que consideran que les caracteriza "se convierta ahora en precariedad sanitaria".

El Sr. Marín dice, según Europa Press,  que a muchos profesores se les hace trabajar pese a tener ERTEs, y que hay autoescuelas que presionan para que vuelvan pero a media jornada, para pagar la mitad del sueldo -el resto esperan que se cubra con la prestación de paro- y luego les hacen trabajar todo el día: "Muchos no podían decir que no porque aún no habían cobrado los ERTEs".
Marín señala también que el modelo de las autoescuelas se basa en "una formación de bajo coste, la precariedad laboral y el fraude general, con muchos de sus trabajadores como falsos autónomos": sostiene que los profesores tienen contratos de media jornada, cuando trabajan 12 horas, y cobran de 4 a 8 euros por clase.
De otra parte, el presidente de la Federació d'Autoescoles de Catalunya, Raül Viladrich, ha defendido que las empresas han tomado las medidas necesarias: "Se han hecho los deberes".
Es más que deseable por el bien de todos que el presidente de la Assemblea de Treballadors Assalariats d'Autoescoles de Catalunya (ATAAC) y el presidente de la Federació d'Autoescoles de Catalunya (FAC), sumen esfuerzos y denuncien a esas empresas, con nombre y apellidos,  ante la autoridad correspondiente por su mala praxis.

Enlace para leer la noticia completa:




sábado, 20 de junio de 2020

LA TAREA DE CONDUCIR, EL DILEMA DEL CIEMPIÉS Y LOS PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DEL TRÁFICO

(I)

Conducir un automóvil es una de las actividades más complejas de la vida diaria para cualquier grupo de personas de la misma edad, dado que se desarrolla en un ambiente constantemente cambiante y no exento de dificultades y riesgos como son las calles y el tráfico. Esta actividad incorpora diversas habilidades cognitivas, funciones ejecutivas, motoras y perceptuales (Cutler, 2003).

Como saben muy bien los profesionales de la formación de conductores, una persona que inicia su aprendizaje en la autoescuela para conducir un automóvil necesita atender a todos y cada uno de los componentes de esta actividad: estar pendiente de embrague, del freno  o del acelerador, según lo exija la situación, ajustar el movimiento del  embrague al cambio de marcha, prestar atención a las señales de la vía, a los vehículos que circulan por , a los peatones y a los hechos que se van presentando en el desarrollo de su trayectoria, etc. Es en esa fase del aprendizaje cuando se producen los consabidos  deslices (slips, es decir, los errores de ejecución de una acción determinada, por ejemplo, querer encender las luces y en su lugar encender el limpiaparabrisas, presionar el acelerador en lugar del freno, etc.,  pero a medida que aumenta la práctica, la combinación  de todos estos mecanismos o subtareas se hace más fluida y la realización requiere de menos atención por parte del conducto o conductora, resultándole la conducción más cómoda y relajada.

La definición más tradicional concibe la conducción de un automóvil como una tarea compleja de control de un mecanismo móvil en un entorno sometido a continuo cambio, realizándose de forma paralela subtareas como el ajuste de la trayectoria o el cambio de marcha.

El conductor o conductora pasa en la autoescuela por un aprendizaje cognitivo y un aprendizaje motor. Las primeras etapas del aprendizaje están protagonizadas por el procesamiento controlado, mientras que una vez que se realiza una amplia práctica de la tarea son los procesos automáticos los que lideran dicha actividad.  Con el tiempo acumula kilómetros y automatiza todas las tareas necesarias para conducir. Llega el momento que lo hace  de forma automática, sin pensar. Es entonces cuando manifiesta que conducir es una actividad simple y sencilla, pero, insistimos, no lo es. Es una tarea con un grado alto de complejidad.
                  
Durante sus desplazamientos, el conductor ha de ir, constantemente, haciendo ajustes a la trayectoria que recorre su vehículo. Para ello necesita captar, identificar e interpretar informaciones, analizarlas y, en base a ello, prevenir y tomar decisiones para llevarlas a la practica en un conjunto de acciones ejecutadas correctamente, a la vez que controla los efectos de esas acciones mediante feed-back, que le sirve para procesar nueva información. Y así de forma continua y sin solución de continuidad mientras está a los mandos del vehículo. Conducir es una actividad  no difícil pero sí bastante compleja como refleja  el siguiente diagrama de flujos del funcionamiento del conductor en el sistema conductor-vehiculo- carretera (Shinar 1978).


Las tareas básicas de la  actividad de conducir se pueden resumir en cuatro: percepción, previsión, decisión y acción. Unas de carácter cognitivo y otras de carácter motor.


Percepción (Capacidad perceptiva y atención del conductor)

El conductor percibe, a través de los sentidos, toda la información que le proporcionan el entorno (estado de la calzada, señales, fenómenos atmosféricos, otros vehículos, peatones, etc.), su propio vehículo y su estado psicofísico:

·       Del entorno: el estado y características de la via, señalización existente, situación y velocidad de los demás usuarios, condiciones climatológicas existentes en cada momento, etc.).
·       Del vehículo que conduce: potencia, velocidad, tamaño, capacidad de frenado, etc.
·       De sí mismo: seguridad en la conducción, cansancio físico o psíquico, etcétera.



Previsión (Toma de decisiones y elección de respuesta del conductor)

Una vez procesada toda la información que ha recibido, prevé lo que va a ocurrir, sus consecuencias y decide lo que ha de hacer (frenar, acelerar, girar el volante, esperar, poner el intermitente, cambiar de velocidad, etc., etc.). En definitiva, la previsión no es otra cosa que anticiparse a lo que va a ocurrir o pudiera ocurrir con las conductas de los demás para facilitar la correcta utilización de nuestro entorno vial y por encima de todo evitar un accidente o un incidente previniendo de antemano que podemos dominar la situación.


Acción/ejecución (Capacidad de respuesta y conducta dinámica sobre el control del vehículo)

Es la última fase de la conducta del conductor: ejecutar con precisión lo que ha decidido. Y lo realiza de manera automática, casi sin pensar qué hacer y cómo hacerlo.

Desde que finalizó nuestro aprendizaje en la autoescuela, la tarea la hemos ido ejecutando de forma cada vez más automática, conforme el control es asumido por los centros inferiores del cerebro. Y ya nos encontramos ese estadio en el que la ejecución sobre los mandos del vehículo se  vuelve tan fluida y automática que cualquier conductor o conductora conduce su vehículo mientras está pensando en otras cosas. Así, al conductor de automóvil le resulta fácil, tras años de práctica, mantener con soltura una conversación con un pasajero mientras conduce su coche por la carretera. Lo hace de manera automática, sin pensar en qué orden ha de ejecutar cada uno de los movimientos requeridos. Acuérdense de las primeras prácticas en la autoescuela.
En la fase final, la destreza se ejecuta de forma cada vez más automática, conforme el control es asumido por los centros inferiores del cerebro. Este es el estadio en el que la ejecución se vuelve tan fluida y automática que la persona puede poner en práctica la destreza mientras está pensando en otras cosas. Así, al conductor de automóvil le resulta fácil, tras años de práctica, mantener con soltura una conversación con un pasajero mientras conduce su coche por una carretera sinuosa o por una autopista haciendo las pertinentes correcciones.


Y llegado a este punto, me viene a la memoria “el dilema del ciempiés”. Es un poema corto que le da nombre a un fenómeno psicológico llamado el efecto ciempiés o el síndrome del ciempiés. 
Un ciempiés paseaba contento
Hasta que un sapo burlón
Le dijo: «Cuéntame, ¿en qué orden mueves las patas?»
Le llenó de dudas hasta tal punto
Que cayó exhausto en el camino
Sin saber cómo correr.
 El efecto ciempiés tiene lugar cuando una actividad que normalmente se realiza de forma automática se interrumpe por ser consciente de ella o por la reflexión sobre la misma. Por ejemplo, que un conductor o conductora se concentre demasiado en el orden en que ha de actuar sobre los mandos de su vehículo puede perjudicar el desempeño de la tarea. Este efecto también se conoce como  la ley de Humphrey ya que fue planteado por el psicólogo George Humphrey en 1923. En sus propias palabras: Es una rima psicológica. Contiene una verdad profunda que aparece cada día en la vida de todos nosotros. El ciempiés de quedó trabado cuando intentó pensar en el orden en que movía sus pies.
LaS vías públicas son espacios que debemos compartir. Todos los que las usamos, sea como peatones o conductores, estamos obligados a tener comportamientos que nos ayuden a circular de manera segura, fácil, cómoda y con fluidez.

Para alcanzar esa seguridad deseable no es suficiente con ser un experto en el manejo del vehículo, conocer las normas y señales de tráfico y cumplir con ellas. Es además  que nuestros comportamientos se rijan por los principios fundamentales que rigen la circulación.

Dado que ni en la Ley de Seguridad Vial ni en el Reglamento General de Circulación existe precepto concreto que exprese cuales son estos principios hay que decir que aparecen diversificados en su articulado.


Hay normas para los conductores, los ciclistas, los peatones. Todas esas normas que se aprendieron en la autoescuela están dispersas a lo largo de su articulado, pero no definen de manera expresa cuales son los principios que deban regular la circulación, pero ¿cuáles son esos principios? He aquí los fundamentales:

·       Principio de la confianza en la normalidad del tráfico.
·       Principio de la responsabilidad.
·       Principio de la seguridad o de la defensa.
·       Principio de la circulación dirigida.
·       Principio de la integridad corporal.
·       Principio de la señalización.

De no cumplirse estos principios, el tráfico vial no sería posible.

* Comentaremos estos principios en una próxima entrada.