Incluyo en mi
blog, con esta entrada número 100, una nueva etiqueta, a la que llamo
“colaboraciones”. Desde hoy invito a todos los lectores que quieran aportar
algo relacionado con las autoescuelas (escritos,
fotos, documentos, etc.) que consideren que formar parte de la historia de las mismas a que me lo hagan llegar al correo: lectorautoescuelas@gmail.com.
Hoy se inician los
contenidos de la susodicha etiqueta con un escrito que me remite Rafael
Mas Pascual en respuesta a una invitación personal.
Rafel Mas ha sido presidente
de la Federación de Autoescuelas (FAB) desde el año 1984 al 2.000.
Desde aquí le doy las gracias por su colaboración.
DE MI PASO COMO
PRESIDENTE POR LA FEDERACIÓN PROVINCIAL DE AUTOESCUELAS DE BARCELONA (FAB).
Por Rafael Mas
Pascual
Cuando asumí la presidencia de la FAB
(Federación de Autoescuelas de Barcelona) en el año 1984 pedí un informe sobre
la situación económica financiera de la Federación. En él se decía que se
adeudaban 10 millones de pesetas que una
minoría de afiliados habían depositado en la Federación para la construcción de unas
pistas de prácticas en la ciudad de Barcelona; al no aportar más afiliados su
colaboración, no llegaron a construirse,
pero los 10 millones se devolvieron, aunque ya se habían gastado una parte importante entre
estudios, proyectos y gestiones.
En el mismo informe se decía que si no se
cambiaba el Organigrama de la Federación, deberíamos vender patrimonio. Hicimos varios reajustes (despidos,
control del gasto, control de extras, etc.).
A partir del cuarto año (2ª legislatura)
mantuvimos durante 13 años las mismas cuotas y en el año 2000, al dejar la
Presidencia también dejé en caja 70 millones de pesetas y sin un céntimo de
deuda y sin vender patrimonio.
La Federación, al instaurarse los Centros
Médicos para el certificado al permiso de conducir, abrió uno en la C/ Diputación
(propiedad de la Federación) siendo Presidente Don Juan Laborda. Se creó la
Sociedad GECSA (Gremio de Escuelas Catalanas S.A.) de la que fui el Consejero Delegado.
Por la poca colaboración de los
afiliados, el Centro GECSA se cerró. Al cabo de algunos años el Colegio de
Médicos tuvo que devolver, por sentencia jurídica, un % a todos los centros que
emitieron certificados para la obtención del permiso de conducir.
Yo, junto con mis hermanos teníamos un
Centro en la C/ Berlín, n 4. Al hacer la reclamación al Colegio de Médicos y
conseguir la devolución, firmé el
correspondiente documento como representante de los dos Centros. El talón que
envió el Colegio de Médicos, según dedujimos más tarde, incluía la devolución
que correspondía a los dos Centros. El señor Codina (abogado de la FAB) ingresó
personalmente el talón en la cuenta de la Federación; era el mes de Agosto pero
no recuerdo el año.
Posteriormente hicimos la reclamación de
la parte que correspondía al Centro de la calle Berlín. La reclamación fue larga e infructuosa. Por
un exceso de honestidad deje la reclamación como pérdida y al mismo tiempo
también perdí una cantidad importante de pesetas (miles).
Creamos la Sociedad “FEC S.L.” (Federación
Escuelas Catalanas S.L.) para abrir la escuelas de motos (AE.FAC motos). En
aquel momento hizo un buen servicio a los asociados de Barcelona (ciudad) y
proporcionó importantes ingresos a la Federación. En cumplimiento de la normativa laboral
ejercí de administrador de FEC.S.L. También
por cumplir con las directrices de la D.G.T estaba dado de alta como profesor y
director de la AE FAC motos.
En definitiva, nunca estuve en la nómina
de la Federación y sí lo estuve, primero como Administrador DE GECSA y después de FEC. S.L., empresas propiedad de
la Federación de Autoescuelas de Barcelona.
Otras cuestiones que llevamos a cabo y
considero positivas para la Profesión y/o Federación:
- Al establecerse las revisiones de ITV,
conseguimos que a nuestros coches nuevos
la primera inspección se realizara a los dos años.
- Se creó la primera Federación autonómica
de España: Federació d’Autoescoles de Catalunya (FAC).
- Establecimos reuniones periódicas para
actualizar tarifas en base a un estudio de la Cámara de Comercio de Barcelona
de la cual era miembro del Pleno en representación de los Centros de Enseñanza.
- Logramos, después de mucho batallar,
que la fase de presencia para obtener el
título de P.F.V.(Profesor de Formación Vial) se realizara en Barcelona. Por entonces había que ir a Madrid.
- Conseguimos que los Profesores de
autoescuela se convirtieran en Profesores de Formacion Vial (P.F.V.) a través de un curso de asistencia obligatorio
sin examen final como,
en un principio, quería la D.G.T. Aquellos compañeros que no quisieron hacerlo,
yo incluido, pudieron seguir ejerciendo, sin ningún problema, como profesores
de autoescuela. Este acontecimiento supuso uno de los éxitos más importantes de la
Profesión que favoreció a todos (trabajadores y empresarios). Y se consiguió empleando
el sentido común y la unidad de todo el Sector. Unidad y fuerza que demostramos
masívamente al manifestarnos con nuestros vehículos en Barcelona con asistencia,
incluso, de compañeros de toda Catalunya.
Al final de la manifestación, por las
calles más amplias de la ciudad, nos concentramos en Montjuic, hecho que aprovechó
la policía nacional para bloquearnos en la Zona de Exámenes y tenernos todo el día, noche incluida, sin poder movernos con
nuestros coches.
Aquella noche tuvimos de vecino a Don
Juan Carlos de Borbón que se alojaba en el Palacete Albeniz. ( Este hecho a
alguien le supuso…?). Por fin, el Director General Sr. Martín
Palacin reconoció nuestra sensatez y fue un gran éxito para todos.
- En el ámbito federativo nacional, logré
impedir, con argumentos y la ayuda del
presidente de Málaga, José del Rio , la venta de los locales de Pozuelo de
Alarcón, propiedad y sede de FENAE ( Federación Nacional de Autoescuelas de
España) en la última etapa siendo Presidente del Sr. Sanz.
- Hasta el año 2000, fecha en que dejé la
Presidencia, los presidentes nunca habíamos recibido remuneración alguna de la
Federación.
Junto con las Asociaciones de Madrid, Valencia,
Galicia, Asturias y alguna otra más fundamos CEA(Confederación Española de Autoescuelas). Al
cabo de algunos meses de conversaciones acordamos la fusión de CEA y FENAE y fundamos CNAE (Confederacion Nacional de
Autoescuelas) (cuyo nombre propuse) y, en ausencia del Presidente de CEA Sr.
Daniel Victoria, firmé, como vicepresidente, la fusión.
En un viaje a Tokio, como miembro del
“Ple de la Cambra de Comerç de Barcelona”, pude comprobar las magnificas
instalaciones que los japoneses tenían para que sus futuros conductores entendieran,
comprobaran y experimentaran los problemas que comportaba una conducción por encima
de sus propios límites.
Regresé pensando en el primer circuito de
estas características que podríamos construir en Catalunya. Para ello establecimos contactos con el Circuito de Catalunya que no
fructificaron. Pocos meses después lo llevó a cabo el RACC en los terrenos que
nosotros habíamos estado visitando.
A través de Josep Salinas, titular de
autoescuela y vecino de Martorell, tuvimos contactos y reuniones con responsables
del Ayuntamiento de Martorell. El Sr.
Alcalde consideró la idea como muy positiva y nos cedía unos terrenos al lado
mismo de SEAT que también se interesó por el proyecto, incluso pedimos la
colaboración del Sr. Zanini, experto en competiciones automovilísticas.
Estas conversaciones se realizaron en los
últimos meses de mi presidencia. Incluso
presenté a mi sucesor en la presidencia al Sr. Alcalde de Martorell. A
partir de aquí ya no sé más. Lo que sí sé es el trabajo ruin y mezquino en
CNAE y contra mi persona del personaje
que ejerció de presidente al terminar mi mandato. ¿Por qué me pregunté entonces
y… aún hoy me lo sigo preguntando.
Ante esta situación, mi dignidad no me
permitía ostentar las presidencias de honor de
FAC (Federacion d’Autoescoles de Catalunya) y de CNAE (Confederacion Nacional de
Autoescuelas), cargos honoríficos que
las respectivas Asambleas habían aprobado por unanimidad concederme sin que yo hubiera pedido nada.
El presidente de CNAE que ostenta el
poder desde hace treinta años, que modifica los Estatutos en beneficio propio y
que, cada vez que intuye cambios políticos, avanza
las elecciones, permitió a mi sucesor, para asegurarse los votos de Barcelona, que dijera todo lo que quiso contra mi persona en una Asamblea de CNAE en la que es obvio
que yo no estaba presente y permitió también
un escrito firmado por él contra mí en la revista Autoescuela.
También es verdad que en nuestra Profesión,
hoy nadie o casi nadie levanta la voz para protestar; es como si la lengua nos la ha hubiera comido el gato.
Y por último, aunque en el tintero queda
mucha tinta, me gustaría saber si FAC sigue existiendo.
