sábado, 11 de febrero de 2017

EL PERMISO DE CONDUCIR POR PUNTOS

¿Cuántas personas pasan cada año por los cursos de recuperación de puntos? 



 Todos los conductores españoles, o casi todos, saben,  que el día 1 de julio del mes pasado, el permiso de conducir por puntos cumplió su primera década. Pero quizá ignoren la cantidad de personas que han asistido a estos  cursos durante estos diez años.
La respuesta nos la ha proporcionado  el Gobierno al contestar a una pregunta por escrito del grupo socialista en el Congreso de los Diputados.

Desde que se instauró en España el “permiso de conducir por puntos”, un total de 503.291 personas han asistido a los cursos de recuperación total o parcial de puntos. Esto quiere decir que más de 50.000 conductores han venido asistiendo cada año a los mismos.

Del total de asistentes a los cursos, 222.148 (44%) asistieron a cursos de recuperación parcial y el resto, 281.143 (56%) lo hizo para recuperar el permiso de conducir que habían perdido. Dentro de este segundo grupo, el 55% de los alumnos de recuperación total lo fueron por sentencia judicial y el 45% por haber agotado todos los puntos.

El curso de recuperación parcial creo que cuesta unos 211 euros y el de recuperación total unos 398. De seguir empeñándose los conductores en tener comportamientos, no sólo absurdos, sino muy peligrosos para su integridad física  y la de los demás, este año 2017, volverán a pasar por estos cursos una cantidad de personas parecida o igual a la de los años  anteriores. Y tendrán que rascarse el bolsillo. La cantidad que ingresarán las autoescuelas agraciadas no es nada desdeñable porque se aproximará a los  dieciséis millones de euros.

Por su entidad, el legislador optó legítimamente por configurar estos cursos como un servicio público, y la misma calificación jurídica se ha mantenido en las sucesivas reformas legales del texto articulado de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, aprobado por Real Decreto Legislativo 339/1990, de 2 de marzo (TALTSV), desde 2005, incluida la más reciente, introducida por la Ley 6/2015, de 30 de octubre.

En la respuesta, el gobierno recuerda que estos cursos tienen un carácter preferentemente de reeducación. Su  principal objetivo, en todos los países donde están instaurados, es el de modificar los comportamientos peligrosos de los conductores que han perdido parte de sus puntos y quieren recuperarlos  o han perdido su permiso de conducir. En estos cursos, los profesores, encargados de impartirlos, intenta sensibilizar a los participantes sobre las gravísimas consecuencias que para la vida de las persona, incluida la propia,  tiene la inobservancia de las normas que regulan la circulación de vehículos.

Se constata, según el Gobierno,  que el perfil de muchos conductores que han asistido a estos cursos se ha modificado reduciendo el número de infracciones cometidas, es decir, su comportamientos viales han mejorado.

Por ello— sigue diciendo el ejecutivo — la credibilidad y la eficacia de los cursos queda debidamente garantizada, con independencia del instrumento jurídico de intervención sobre el que haya de pivotar el sistema de gestión de estos cursos de sensibilización y reeducación vial.

El Gobierno, en su respuesta, recuerda que la Dirección General de Tráfico, además de la apertura del procedimiento de investigación interno, dictó el 1 de agosto de 2016 una Resolución por la que se acordó la suspensión cautelar del citado procedimiento de contratación hasta que finalicen las investigaciones en curso. Todo ello con la finalidad de evitar el perjuicio para el interés público que se produciría en caso de continuar el procedimiento hasta la formalización de los contratos y el inicio de su ejecución, siempre que se hubieren producido defectos no subsanables en parte de los actos preparatorios determinantes de la nulidad de dichos contratos.

Así están las cosas y mientras tanto… esperar que tengan una solución satisfactoria para todas las partes implicadas.