jueves, 12 de julio de 2018

HA FALLECIDO UN GRAN MAESTRO DE LA SEGURIDAD VIAL


La noticia la ha dado a conocer su nieto y fiel seguidor  Javier Costas con estas sencillas y emotivas palabras:
 Mi abuelo, Paco Costas, ha fallecido esta tarde, a los 86 años, después de luchar contra una grave enfermedad. Le echaremos mucho de menos.
Gracias, maestro, por todo lo que me enseñaste sobre la vida, y sobre automóvil. Descansa en paz.

Francisco Costas Verde, más conocido como Paco Costas, ha sido un periodista mordaz e incisivo que siempre ha ido al meollo de la cuestión sobre todo cuando escribía sobre seguridad vial.







Sus trabajos en el mundo del motor y de la seguridad vial han sido numerosísimos. Fue, también, el inventor de “La segunda Oportunidad”, aquel excelente programa de televisión de los años 70 del que ya he hecho, en otras ocasiones, alguna referencia en este blog. He de decir  que desde la emisión del primer capítulo de aquel excelente y didáctico programa, Paco Costas se convirtió para mí en un referente en seguridad vial.

Cuando he leído la noticia de su muerte, no he podido por menos que dirigir mis ojos a mi pequeña biblioteca y enseguida he localizado el lomo de aquel libro que le publicó el RACE allá por el año 1996 y que he releído en más de una ocasión: Por una Conducción más segura es su título.

En su contraportada hay tres interrogantes a los que Paco Costas intentó dar respuestas a lo largo de sus páginas:
-     ¿Están sus habilidades como conductor en consonancia con las prestaciones del coche que conduce?
-     Considera usted su nivel de conducción a la altura que exigen las carreteras de hoy?
-     ¿Está usted preparado para eludir el eventual riesgo de un accidente?

En la página siete hay una dedicatoria impresa que reza así:

A los que saben, a los que no saben,
a los que creen que saben,
y a los que aún no han empezado
a conducir, con todo mi respeto.


El maestro de muchos, yo entre ellos, inició su último viaje el pasado día 11 de julio. Ya debe haber hecho el recorrido para llegar al más allá por esas carreteras — quizás autopistas, ya que estamos en el siglo XXI — que espero que las haya encontrado todo lo seguras que él siempre defendió para todos los mortales. Descanse en paz, maestro.