Los
principales cambios de la educación vial de tres fases en comparación con el
modelo del plan de estudios anterior de dos fases fueron: un nuevo tipo de
periodización de la educación, un aumento de la cantidad de educación vial y
más retroalimentación; sumando la educación en la autoescuela a lo que se dio
en llamar “licencia de enseñanza” o co-enseñanza y enfatizando el trabajo
independiente de los aspirantes y la responsabilidad ambiental.
La
educación vial en tres fases constaba de: una fase básica, una fase de
formación y una fase de profundización.
Tras
la fase básica, seguía una prueba de conducción, tras la cual se pasaba a la
fase de formación avanzada. La formación vial finalizaba con una fase de
profundización y de aquí a la fase de formación autónoma.
El
contenido y estructura de docencia de la fase básica en la autoescuela era
ligeramente diferente al contenido y estructura de la docencia con autorización de enseñanza, pero
la fase de formación y la de profundización eran iguales para todos. (Asociación
de Escuelas de Automoción 2012.)
En la historia de la formación de conductores/as de este
País nórdico de 5,5 millones de habitantes se puede hablar de un antes y un
después: una formación antes de la aprobación de la Ley 387/2018 sobre la modificación de la ley
de licencias de conducir y un después, a partir de la entrada en vigor de ésta
ley, el 1 de julio de 2018.
El
cambio de modelo supuso realizar la formación de conductores en una etapa. Esto significaba que toda la
enseñanza se llevaría a cabo antes del examen de manejo.
El
modelo de formación de conductores de una etapa comienza con un período de
enseñanza teórica de 4 horas llamado la teoría del primer permiso de conducir,
para los que no tienen un permiso de conducir anterior. Se deben tomar un
mínimo de 10 lecciones de manejo (son obligatorias); la mitad de las cuales
pueden ser en un simulador. El entrenamiento de identificación de riesgos es
obligatorio y debe realizarse antes del examen de manejo.
La
formación en identificación de riesgos incluye 4 horas de instrucción teórica y
4 horas de instrucción de conducción, que se pueden realizar con coche o con
simulador.
Alrededor
del 80% de los estudiantes que obtienen su licencia de conducir en las
autoescuelas eligen el número mínimo de lecciones requeridas por la ley, y
alrededor del 20% eligen un paquete de aproximadamente 1 a 4 horas de
conducción.
Después
de suspender la prueba de manejo, alrededor del 60% de los estudiantes toman
lecciones adicionales. Algunas autoescuelas exigen que el estudiante tome
lecciones adicionales después de suspender el examen. (Airaksinen et al. 2021,
23.)
En
2013, se modificó la ley de licencias de conducir, por lo que el sistema de
formación de conductores de dos etapas que había estado en uso en Finlandia
durante casi un cuarto de siglo (1989-2013) se cambió a uno de tres etapas que
ha durado alrededor de un lustro, de 2013 a 2018.
En
2013 quedó dividida en tres fases: una primera,
la más básica; consiste en la típica formación teórica y práctica que se imparte
en nuestras autoescuelas. En esta fase se adquieren los conocimientos y las
destrezas que le van a permitir superar la prueba teórica y la de circulación.
Si se consigue superar ambas pruebas se obtiene un permiso de conducir
temporal, por dos años. Y, al contrario de lo que ocurre en España, que una vez
aprobado y expedido el documento ya se puede conducir y se abandona todo tipo
de aprendizaje, en Finlandia el permiso que se expide es temporal con validez
de dos años. Y, entonces, se inicia la
segunda fase. Esta tenía carácter de
aprendizaje, pero mucho más práctico. Durante la misma se le permite circular libremente
mientras posee un permiso temporal, pero cada cierto tiempo debe volver a la
autoescuela para que el desarrollo de
sus habilidades perceptivo-motoras al volante sea evaluado y corregido si se
diera el caso. También se presenta como una gran oportunidad para exponer las
dudas y preguntas que al alumno/a le puedan haber surgido sobre la
conducción.
Y finalmente, la tercera y última tiene lugar cuando el alumno/a ha estado
conduciendo por un tiempo cercano a un año. Son lecciones sobre conducción
económica y segura. Dentro de este tipo de lecciones están las clases prácticas
de conducción en superficies resbaladizas, conducción nocturna, frenadas de
emergencia en diferentes situaciones y ejercicios de frenada y esquiva con el
conocido popularmente como “prueba del alce”. Se practica, en general diversas situaciones esencialmente
las que pueden provocar una pérdida de control del vehículo.
Transcurridos unos dos o tres años, según la pericia del futuro conductor,
entre la primera fase y la finalización de la última, el alumno estará en
condiciones de obtener su permiso definitivo y además estará preparado para
afrontar gran cantidad de situaciones en las que la gran mayoría de conductores
españoles se verían seriamente
desbordados.
El
modelo de educación vial de tres etapas y los contenidos del plan de estudios
se basan en un modelo de 5 niveles, donde se examina al conductor a través del
manejo del automóvil, la gestión de la situación del tráfico, los objetivos de
conducción, las condiciones personales y el entorno social. El principal cambio
de la educación vial de tres fases en comparación con el modelo de plan de
estudios anterior de dos fases fue un nuevo tipo de periodización de la
educación, aumentando la cantidad de educación vial y la retroalimentación
Una
vez más, el 1 de julio de 2018, Finlandia cambió a un modelo de formación de
conductores de una etapa. Esto significa que toda la enseñanza se
realizaría antes del examen de manejo.
El
modelo de formación de conductores de una etapa se inicia con un período de
enseñanza teórica de 4 horas, llamado la
teórica del primer permiso de conducir, para los que no tienen un permiso de conducir anterior.
En
cuanto a la práctica, Se deben tomar un mínimo de 10 lecciones, la mitad de las
cuales pueden ser en un simulador.
La
formación sobre la identificación de riesgos
debe realizarse antes del examen de manejo. Incluye 4 horas de instrucción teórica
y 4 horas de instrucción de conducción, que se pueden realizar con coche o con
simulador.
Alrededor
del 80% de los estudiantes que obtienen su licencia de conducir en las
autoescuelas eligen el número mínimo de lecciones requeridas por la ley, y
alrededor del 20% eligen un paquete de aproximadamente 1 a 4 horas de
conducción. Aproximadamente una quinta parte de los que eligieron el número
mínimo de lecciones toman lecciones de manejo adicionales antes del examen de
manejo. Después de una prueba de manejo suspendida, alrededor del 60% de los
estudiantes toman lecciones adicionales. Algunas autoescuelas requieren que el estudiante tome lecciones
adicionales después de suspender el
examen de manejo. (Airaksinen et al. 2021, 23.)
Evolución del nuevo modelo formativo de 2018
No
es acertado hablar de modificación porque más que una modificación de la
normativa anterior fue crear una nueva normativa mativa para la obtención del
permiso de conducir, porque, en realidad, más que una modificación lo que se
hizo fue definir un modelo completamente nuevo con las siguientes particularidades:
•
Desaparece el modelo de formación en tres fases que estuvo en vigor hasta el
momento de entrada en vigor de la nueva normativa.
• Se
añade una formación vial teórica de 4 horas obligatoria; se puede llevar a cabo
a los 16 años.
•
Previo al examen práctico, se reduce la formación práctica obligatoria del
mínimo de 18 horas a 10, pudiéndose iniciar esas prácticas a los 16 años,
mientras que en el modelo anterior, la edad para iniciar las prácticas era un
mes antes de cumplir 18 años.
• La
formación teórica obligatoria desaparece.
• La
formación sobre seguridad vial de 4 horas teóricas y 4 horas prácticas, que se
incluían en la fase Avanzada del modelo que estaba en vigor, se convierte en
obligatoria y previa al examen práctico.
• Se
añade una formación de 4 horas obligatoria si en el periodo de dos años
posteriores a la obtención del permiso de conducir se incumplen determinadas
normas relacionadas con la seguridad vial.
Con
la reforma y en relación al permiso de conducir de la clase B, se pasa de un
modelo de formación orientado a la educación vial a otro diríase que orientado a la obtención del permiso. Se redujeron
las horas de formación teórica y
práctica, al tiempo que se habilitaron
nuevos métodos de aprendizaje, como la instrucción en línea y con simulador. La
instrucción para la licencia de enseñanza se facilitó de muchas maneras y los
requisitos para la licencia de conducir se hicieron más estrictos
La
reforma fue bastante protestada por las autoescuelas. Cuando se reduce el número de lecciones, es más difícil para
los estudiantes adquirir las habilidades necesarias para conducir un automóvil.
Como regla general, el cliente no quiere comprar capacitación adicional
voluntaria, y se presentan a examen con más frecuencia y en consecuencia
aumentan los suspensos.
Los
requisitos para obtener la licencia de
enseñanza se facilitó de muchas maneras. Cayó el precio del carné de conducir y aumentó
la popularidad del permiso de enseñanza.
Después de la reforma de la ley, el número de empleados de las autoescuelas
disminuyó claramente. Sin embargo, los efectos variaron mucho en
diferentes regiones y empresas, y algunos de los efectos económicos en las
empresas se realizan con retraso.
Las
solicitudes de la licencia de enseñanza se incrementan, a expensas de la
enseñanza de las autoescuelas; el número de matriculaciones en las mismas se redujo
considerablemente. El número de empleados de las empresas
que ofrecen formación de conductores disminuyó claramente. Las autoescuelas,
según algunos autores, redujeron actividad con el riesgo de cerrar muchos centros.
Sin
embargo, los efectos variaron mucho en diferentes regiones y empresas, y
algunos de los efectos económicos en las empresas se realizan con
retraso. "Según los resultados de la encuesta enviada a las
autoescuelas y los cursos de formación de conductores, la mayoría de las
pequeñas empresas y los cursos de formación de conductores en particular
sintieron que la situación financiera de la empresa se debilitó después de la
reforma de la ley"(Noora Airaksinen, experta en seguridad vial).
Como podemos apreciar, “en todas partes cuecen
habas”.